A veces no me gustan los sábados. He llegado a la conclusión de que es porque durante la semana estoy ocupada haciendo un montón de cosas, luego llega el sábado, freno, y de repente me encuentro con mucho tiempo libre para pensar.
Normalmente cuando me pasa esto, suelo llenar mi día de distracciones y cosas por hacer: desde lavar ropa hasta ver toda una serie en Netflix o quedarme todo el día viendo Tiktok. Pero el sábado pasado decidí sentarme a sentir. Abrí mi cuaderno y empecé a escribir. Al inicio tuve mucha resistencia. Pero empecé con esta misma frase: “No me gustan los sábados.” Decidí ahondar en la situación e investigar un poco por qué no me gustan. Cuando terminé de escribir, sentí que me quité un peso de encima.
Es más fácil ignorar lo que siento, ponerle la tapa a la olla y distraerme con cualquier cosa. Y mientras más tiempo pase ignorando lo que siento es peor, porque después la tapa sale volando como olla a presión… y hace un desastre.
Así que ese día me senté - a sentir todo. Dejé salir las emociones incómodas. Alguna vez leí por ahí que lo verdaderamente valiente no es ignorar lo que sentimos y no llorar, sino sentarse con todas esas emociones y darles un espacio, reconocerlas, validarlas y aceptar que no te hacen más débil sino más humano. Y que a veces dejarlas salir es la mejor forma de “resolverlas”. Si las reprimes mucho se comportan como esos adolescentes rebeldes. Con cierto grado de libertad -y confianza- baja el nivel de rebeldía.
Si me preguntas a mi, sentarme a escribir es justamente eso: sentarme a sentir. Escribir es mi forma favorita de desenredar esos nudos internos que son las emociones y que a veces se enredan tanto que no te dejan seguir. Como cuando tienes una contractura muscular y vas a fisioterapia para que te la saquen. En algún momento escribí este post con tips para empezar a escribir en un journal o cuaderno de descarga (así lo llamo con mi psicóloga, porque descargo todas mis emociones ahí).
Hoy terminé un cuaderno y empecé otro. Y es una de las cosas de las que más me siento orgullosa: el haber mantenido la constancia con la escritura durante varios años.
Y últimamente he estado leyendo algunas cartas de los 1950’s, escritas por mis abuelos mientras tenían una relación a distancia. Ahí comprobé la importancia de la escritura. Me ha dado tanta alegría leer algo escrito por ellos, con su puño y letra, tantos años después cuando ellos ya no están aquí para contar esa historia. Esto me motiva a seguir dejando mi legado en palabras, en las páginas de mi cuaderno. Me gusta pensar que si algún día tengo hijos o nietos, y son como yo, van a sentir mucha curiosidad y alegría al leer algo escrito a mano por mi.
Con este post quiero invitarte a que te sientes a sentir. A veces cuando dejas que todos tus pensamientos fluyan, salen las mejores historias, aprendizajes, y reflexiones.
Te dejo algunos posts que he escrito con tips de escritura (valga la redundancia y la repetición):
Escribir desde la vulnerabilidad
Un ratito de silencio y escribir para soltar
Y dos libros que fueron esenciales para instalar el hábito de la escritura en mi vida:
El camino del artista de Julia Cameron. Donde por primera vez leí sobre las famosas páginas matutinas. Aplica también para otro tipo de arte, no solo la escritura.
El camino de la escritura de Julia Cameron. Es parecido al anterior pero más enfocado en la escritura.
¿Algún otro que me recomiendes? Te leo en los comentarios.
Con amor,
Adri
Es tan real lo que escribes…lo puedes aplicar a muchos aspectos en la vida. Descansar con intención está escrito en la Biblia. Por eso Dios nos dio el día de descanso… hasta el descanso al 7o día de la Creacion!!! Es necesario para hacer un reset. Tú lo has logrado con la escritura!!! Y se te da muy bien. Cada Sábado te reseteas y eso es Bueno!! Tu creatividad se renueva y se activa. Bravo!!!
Este post me encantó.... me sentí identificada con varias cosas que mencionas. Me pasa algo similar que a ti con el asunto de los sábados, pero en mi caso es con un lugar. El escrito me trajo ideas de cómo abordar la incomodidad que ha dejado ese lugar, sentándome a sentir ✍️🏼❤️🩹😅 Gracias.