Clases de buceo
No me gustan los journaling prompts* porque son muy profundos. Muchas veces requieren que te lances de una a las profundidades sin siquiera saber nadar. La escritura libre, en cambio, me da mucha libertad para ir paso a paso, para acompañarme en mi proceso. No me limita. Me permite ir explorando poco a poco qué estoy pensando, cómo me siento y cómo estoy actuando en consecuencia. No te lanzas al mar abierto a bucear, sino que primero aprendes a nadar, a flotar en la superficie. Una vez que te enamoras del mar quieres ir más profundo, te metes en clases de buceo, porque no se puede bajar de una. Debes aprender a respirar, a controlar, a ir con calma.
La escritura libre es mi clase de buceo. Me enseña a indagar y profundizar cada vez más. Muchas personas me dicen que no saben cómo empezar a escribir cuando la hoja está en blanco. Le ponen mucha presión a esa primera frase, a ese primer párrafo, para que sea perfecto, profundo, inteligente. La realidad es que la mayoría de mis primeras frases en todos mis escritos, que casi siempre nacen en mi journal, no tienen nada que ver con lo que termino escribiendo. Este mismo post empezó en mi cuaderno con un “volvió mi dolor de cuello”.
Algunas otras que he usado para empezar a escribir (extraídas de mi journal):
Un fin de semana en la playa me basta
Hoy tengo una producción de fotos
Hoy me desperté con un poco de ansiedad
Hoy salí llorando de la psicóloga
Por fin un ratito de silencio
Hoy ha sido un día difícil
Hoy decidí no agarrar el teléfono apenas me levanté
Ya se nos va Enero
Ayer fue un día intenso
Hoy estoy muy feliz
Me gustan los sábados tranquilos
Y mi favorita: “Querido Dios:”
Esta última me ayuda a pensar en la escritura como una conversación.
Como puedes ver, casi siempre empiezo con facts, cosas que son, que me pasaron durante el día. Small-talk. Es un saludo, como cuando llamas a tu mejor amiga a contarle algo.
Eso es lanzarse al agua. Hoy empecé con el tema de mi dolor de cuello y luego fui indagando: ¿Por qué? ¿Qué estoy haciendo diferente? ¿Cómo dormí anoche? Mientras iba escribiendo, fui relacionando mi dolor de cuello al bruxismo. Anoche apreté mucho mi mandíbula. ¿Y por qué será que anoche apreté los dientes? Relacioné mi bruxismo con la ira, con el no decir cosas. ¿Qué cosas no estoy diciendo? Y ahí empezó a salir todo. Con un simple “volvió mi dolor de cuello”. No necesariamente escribí las preguntas, pero si las fui respondiendo de a poco en mi sesión de escritura.
Eso no lo podría haber hecho con un journal prompt. Por eso no soy fan, y está bien. Cada quien que encuentre su forma. Hay personas que prefieren usar un prompt como guía para no desviarse cuando escriben, pero a mi me pasa todo lo contrario. Un prompt me limita, como un cuaderno a rayas, porque muchas veces ni yo misma sé de lo que quiero escribir hoy, simplemente surge, va saliendo y va fluyendo, así como las olas del mar. A veces necesito dibujar para poder expresarme, o hacer un esquema, o escribir en letras muy grandes y separadas cuando estoy enojada o cansada.
La cosa es que, una vez que aprendes a bucear, ya la superficie no te basta. Quieres más. Como la Sirenita, pero al revés. Y eso es lo hermoso de escribir: es una gran aventura de auto-conocimiento. Cada vez encuentras más cosas, aprendes a identificar patrones en tus comportamientos y en tus pensamientos y a relacionarlos entre sí, aprendes a desenredar nudos que muchas veces están en tu cabeza, aprendes a conocer tus miedos y descubres que son solo eso, miedos que están en mente y que muchas veces no salen de ahí. Mucho aprendizaje con un hábito tan simple, sostenido en el tiempo.
Lo más importante es que aprendes a escribir tu historia. Quizás sea una de esas historias para recordar.
-A
*Son preguntas clave o preguntas guía que pueden servir al momento de hacer journaling si no sabes que escribir o cómo comenzar; dan un camino a seguir de un tema en particular.
Escribir debe ser cómo fluir en la vida, sólo así se puede mostrar un poquito de alma...odio los prompts, jajajaj
Hubo un tiempo en que hacia mucho journaling todas las mañanas. Libretas y libretas. Hace años que no lo hago, lo reemplacé por la meditación, pero en esa época me sirvió muchísimo. Tampoco me entusiasman los prompts, prefiero como tú haces, que salga orgánicamente 😍 M.