Insomnio creativo

También llamado nighttime revenge

Últimamente me está costando mucho dormir. No porque no me da sueño, sino porque mi mente va muchísimo más rápido de lo que mi cuerpo puede: lo llamo insomnio creativo. No es un insomnio de dar vueltas en la cama contando ovejitas hasta quedarme dormida. Es un insomnio activo. Porque a estas horas de la noche es cuando me he sentido muy productiva, cuando me he dado el tiempo de escribir y cuando me he dedicado a mis proyectos personales. Me parece que es mucho más fácil concentrarme de noche porque:

• Todos a mi alrededor están durmiendo

• Nadie me escribe por whatsapp, ni me llama, nadie requiere nada de mí

• Ya no estoy en office hours para cumplir obligaciones con mis clientes

• Todo está cerrado, entonces por lo general estoy en mi casa

Me pasa que durante el día me siento constantemente bombardeada por las notificaciones, y aunque no lo quiera, me distraen. Me cuesta concentrarme, y constantemente me encuentro haciendo muchas cosas a la vez. Pero si he notado que durante el día no me enfoco tanto en mis proyectos, sino en resolver temas, apagar incendios, trabajar para otras personas, cumplir con clientes, responder mensajes. ESTO. Respondiendo mensajes se me va casi todo el día. Mensajes de mi negocio en Instagram, mensajes de Whatsapp, mails y llamadas. ¿Cómo puede uno acaso sentarse a parir un proyecto creativo cuando no tienes ni una hora de paz y de trabajo profundo?

Una vez leí de un “síndrome” en inglés llamado Nighttime Revenge. En español vendría a ser algo así como la venganza de la noche. Aunque el título suena muy a Batman, en realidad se refiere a un problema de sueño, en donde estás tan ocupado durante el día que estiras lo más que puedas tu hora de dormir para tener tiempo para ti. Por eso es una venganza, aunque curiosamente te traicionas a ti mismo. 

Mi sueño es sagrado. Pero llevo 3 días durmiendo menos de 6 horas, que para mí es muy poco, que solo cuando era estudiante me quedaba hasta tarde aprendiéndome resúmenes cuando tenía parciales. Mi cuerpo y mi mente necesitan por lo menos 9 horas de sueño para funcionar. Y en medio de este caos, aquí estoy. 01:02 de la noche del primero de abril, acostada en mi cama escribiendo estos párrafos, simplemente porque sentí que tenía que hacerlo. Que me lo debía a mí misma. Y porque hoy todo el día estuve apagando incendios. Y recién pude agarrar el hilo de la concentración a las 10 de la noche. Así que aquí estoy. Cumpliendo con mi deep work y con mi nighttime revenge. Pero honestamente, yo prefiero llamarlo… insomnio creativo.