Está bien re-calcular y cambiar de metas. Está bien ir a mitad de camino y darte cuenta que ese no es el camino que realmente quieres andar. Se vale dar vuelta en U.
Se vale desviarse hacia el camino correcto. Nótese por correcto: el camino que llama a tu alma y no el que piensas que deberías recorrer. No siempre es el camino más transitado.
Nunca es tarde para desviarse hacia el camino correcto.
Esta frase la escribí hace un tiempo, y ahora le encuentro tanto sentido. Le empiezo a encontrar sentido a muchas cosas que hice o dije algún tiempo atrás, sin saber a dónde me llevarían. Hoy estoy en un camino que jamás me hubiera imaginado, viviendo en un país extranjero, inmersa en un duelo migratorio que quizás es mío, y quizás es de mis padres y abuelos, y quizás es de todos un poco. Un desarraigo que aún no termina de sanar y me inspira a seguir recorriendo, seguir explorando, buscando un lugar en el mundo que nunca voy a encontrar, porque quizás lo que más me gusta es vivir en ese estado transitorio. Quizás no tengo un lugar en el mundo. Quizás todo el mundo es mío para explorar, y los lugares simplemente me sirven de base por un tiempo para expandir a donde sea que mi alma me lleve.
Tengo el presentimiento que nunca dejaré de darle vueltas a este tema, y creo que viene siendo momento de aceptar que eso es así, que mi camino no es una línea recta como una autopista, que quizás se ve más como una especie de triatlón en donde no hay camino defininido. A veces me lleva por tierra, a veces por mares y ríos, y a veces me obliga a sacar mis alas y volar. Está lleno de desvíos, atajos, áreas tranquilas y otras donde sientes que no puedes ni respirar. Pero esa es la belleza del camino. Es diferente al de todos los demás.
Es único, es tuyo, cada vez más tuyo, mientras más lo aceptas y más lo aprendes a caminar.
Camino
Nunca es tarde para desviarse
hacia el camino correcto.
Está bien cambiar de rumbo.
Está bien ir por la mitad
y darte cuenta que ese no es
el camino que quieres caminar.
El camino correcto no es
el que es más transitado,
ni el que te dicen que debes tomar.
El camino correcto
Es el que es correcto para ti.
El que llama a tu alma.
Quizás en tu camino
el destino no es lo importante,
sino todo lo que aprendiste
al recorrerlo.
No es en línea recta,
ni fácil de caminar,
quizás te pone a correr,
a saltar,
a nadar,
y te obliga a sacar tus alas
para que aprendas a volar.
Está lleno de desvíos,
atajos,
momentos tranquilos
y otros que te dejan sin poder respirar
pero esa es su belleza.
Es diferente al de los demás.
Es único,
es tuyo.
Cada vez más tuyo,
cuando lo aprendes a caminar.
-A
Muy cierto y apropiado. A quienes que nos ha tocado emigrar, necesariamente pasamos por eso, por esa sensación de no encontrarte contigo mismo, de no liberarte de los recuerdos de tu tierra natal-tu patria- y de obligatoriamente empezar todo de nuevo. Lastimoso.... pero real. 🫤
Precioso texto! Y más ahora que acabo de volver del Camino De Santiago ❤️